La Guaira 1999 (Foto José Lobo)Fuente: www.telesurtv.net 7 de diciembre de 2009
El autor de la exposición fotográfica Heridas de Agua, apuesta a reconstruir la memoria visual del colectivo, que estuvo viva en los días de la tragedia pero que con el paso del tiempo se ha difuminado. Con las fotografías de Lobo, el espectador logra reconstruir la ciudad desolada que quedó tras las peores inundaciones registradas en el país en el siglo XX. De esta manera abre el abanico de la conciencia en una época donde el cambio climático amenaza a la raza humana.
La exposición fotográfica Heridas de Agua, del artista venezolano José Lobo, con el propósito de sensibilizar al espectador, muestra desde el pasado 27 de noviembre en la Universidad Central de Venezuela (UCV), ubicada en la ciudad de Caracas, fragmentos de la realidad que vivió la población del estado norteño de Vargas en el desastre natural ocurrido en 1999.Heridas de Agua, que permanecerá hasta principios de enero en las inmediaciones de la Galería del mencionado centro de estudios, deja "testimonio de la desaparición del hombre y sus querencias, en la tragedia de Vargas", tal como lo refiere un crítico de la obra, José Quiaragua Pinto."Y es que la mirada de José Lobo, ejercitada ya en su vida de cazador de imágenes, nos presenta los detalles y ángulos que fue atrapando, durante días, en esa zona abatida por las aguas", describe Quiaragua. Lobo, quien se inició en la fotografía en 1986 en el departamento de prensa del Ministerio de Educación venezolano, considera su oficio como algo vital. "Es una manera de ir y venir en el tiempo, de detenerlo y en cierta forma de modificarlo", ha expresado el autor."Como fotógrafo he aprendido a mirar con otros ojos la realidad que me circunda, haciéndome, de alguna forma, más humano". Es así como el autor no sólo logra humanizarse, sino sensibilizar a todo aquel que pasa su mirada por alguna de sus fotografías.Ha realizado gran cantidad de trabajos fotográficos, merecedores de premios nacionales. Su destacada participación en concursos internacionales, también figura en su trayectoria.Particularmente en la obra Heridas de Agua, Lobo logra a través del "blanco y negro", los colores que expresan la auténtica realidad, según sus palabras, transportar al espectador a los lugares más golpeados de Vargas en los que su lente capturó ventanas tapiadas, rostros heridos, niños paralizados por el asombro, estatuas de santos mutilados, entre otros escenarios.Entre los galardones que ha recibido el autor venezolano está el Premio Monseñor Pellín, de la XII Edición del año 2000, con la obra Imágenes de la Universidad Central de Venezuela, en el área de foto como Trabajo Documental. También obtuvo una Mención Especial, en el Concurso Fotográfico Ciudad Secreta, organizado por la Editorial Grijalbo Mondadori y el Ateneo de Caracas, en abril del año 2000.Heridas de Agua, evidencia las consecuencias de uno de los peores desastres naturales ocurridos en Venezuela, que se agudizó por la existencia de construcciones en las cabeceras de los ríos, que habían permanecido secos durante años.Su exposición se produce en un momento en el que existe una marcada preocupación en Naciones Unidas ante la persistencia del cambio climático, hecho que representa una fuerte amenaza para la raza humana.Algunos de los datos científicos que intentan explicar el fenómeno natural ocurrido en Vargas en diciembre de 1999, refieren que la ciudad fue víctima de una saturación de los suelos por la cantidad de agua que dejaron las intensas lluvias. Esto a su vez generó que el caudal bajara por pendientes de más de 30 grados, lo que ocasionó deslizamientos de tierra y de la capa vegetal de las montañas.
El autor de la exposición fotográfica Heridas de Agua, apuesta a reconstruir la memoria visual del colectivo, que estuvo viva en los días de la tragedia pero que con el paso del tiempo se ha difuminado. Con las fotografías de Lobo, el espectador logra reconstruir la ciudad desolada que quedó tras las peores inundaciones registradas en el país en el siglo XX. De esta manera abre el abanico de la conciencia en una época donde el cambio climático amenaza a la raza humana.
La exposición fotográfica Heridas de Agua, del artista venezolano José Lobo, con el propósito de sensibilizar al espectador, muestra desde el pasado 27 de noviembre en la Universidad Central de Venezuela (UCV), ubicada en la ciudad de Caracas, fragmentos de la realidad que vivió la población del estado norteño de Vargas en el desastre natural ocurrido en 1999.Heridas de Agua, que permanecerá hasta principios de enero en las inmediaciones de la Galería del mencionado centro de estudios, deja "testimonio de la desaparición del hombre y sus querencias, en la tragedia de Vargas", tal como lo refiere un crítico de la obra, José Quiaragua Pinto."Y es que la mirada de José Lobo, ejercitada ya en su vida de cazador de imágenes, nos presenta los detalles y ángulos que fue atrapando, durante días, en esa zona abatida por las aguas", describe Quiaragua. Lobo, quien se inició en la fotografía en 1986 en el departamento de prensa del Ministerio de Educación venezolano, considera su oficio como algo vital. "Es una manera de ir y venir en el tiempo, de detenerlo y en cierta forma de modificarlo", ha expresado el autor."Como fotógrafo he aprendido a mirar con otros ojos la realidad que me circunda, haciéndome, de alguna forma, más humano". Es así como el autor no sólo logra humanizarse, sino sensibilizar a todo aquel que pasa su mirada por alguna de sus fotografías.Ha realizado gran cantidad de trabajos fotográficos, merecedores de premios nacionales. Su destacada participación en concursos internacionales, también figura en su trayectoria.Particularmente en la obra Heridas de Agua, Lobo logra a través del "blanco y negro", los colores que expresan la auténtica realidad, según sus palabras, transportar al espectador a los lugares más golpeados de Vargas en los que su lente capturó ventanas tapiadas, rostros heridos, niños paralizados por el asombro, estatuas de santos mutilados, entre otros escenarios.Entre los galardones que ha recibido el autor venezolano está el Premio Monseñor Pellín, de la XII Edición del año 2000, con la obra Imágenes de la Universidad Central de Venezuela, en el área de foto como Trabajo Documental. También obtuvo una Mención Especial, en el Concurso Fotográfico Ciudad Secreta, organizado por la Editorial Grijalbo Mondadori y el Ateneo de Caracas, en abril del año 2000.Heridas de Agua, evidencia las consecuencias de uno de los peores desastres naturales ocurridos en Venezuela, que se agudizó por la existencia de construcciones en las cabeceras de los ríos, que habían permanecido secos durante años.Su exposición se produce en un momento en el que existe una marcada preocupación en Naciones Unidas ante la persistencia del cambio climático, hecho que representa una fuerte amenaza para la raza humana.Algunos de los datos científicos que intentan explicar el fenómeno natural ocurrido en Vargas en diciembre de 1999, refieren que la ciudad fue víctima de una saturación de los suelos por la cantidad de agua que dejaron las intensas lluvias. Esto a su vez generó que el caudal bajara por pendientes de más de 30 grados, lo que ocasionó deslizamientos de tierra y de la capa vegetal de las montañas.
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